PONERSE EL CONDON EN LA CABEZA NO SIRVE DE NADA

Estudios realizados con adolescentes que no tenían nada que hacer esa tarde demuestran que ponerse preservativos en la cabeza no solo no sirve de nada, sino que además complica la tarea de respirar por la nariz e incluso no es recomendable para las entrevistas de trabajo.

Mucha gente y no sólo en el Vaticano tenía curiosidad de la funcionalidad de este invento. Este aguerrido estudio nos ayuda a comprender su uso. Y es que ponérselo en la cabeza puede ayudar al flirteo pero ni mucho menos a evitar embarazos ni como dice el Papa de turno tampoco impide la transmisión de enfermedades venéreas.

(Mancebo aburrido ayudando a la ciencia)

El Arzobispo Rouco Mefolloencima dejó claro en una de sus intervenciones recientes que para evitar embarazos estos artilugios del demonio no sirven de nada, lo que realmente está comprobado es el fornicio con los monaguillos, como él dice: “En dos mil años no se nos ha quedado preñado ningún monaguillo, 100% mire usted, sin gomitas ni tonterías”

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